Contra (J)aula Segura

Cita

«Aula Segura, es parte de una guerra declarada por parte del Estado en contra de una generación de personas y vinculos que se gestan, crecen y se enfrentan a este orden.»

Desde el año 2006 no existe invierno en el cual no hayamos encontrado calor en una fogata humentante en medio de la calle. Hablamos de que una forma de resistencia y ofensiva desplegada en el centro, periferias y regiones de este territorio que se expresa hasta nuestros días, no sin la ausencia de lamentos y alegatos de gobernantes, politicos, periodistas, y gran parte de la población que ve en estos actos, en apariencia sin sentido, no un foco de rebelión, sino que un acto en contra mismo de la convivencia de la democracia y sus canales de participación. “tomarse la calle”, “tomarse el liceo”, “tomarse una esquina”, “una piedra”, una “botella”, tomarse el uso de la imaginación para derrumbar por algunos segundos la pacificación democrática.

contra el zorrillo

¿Quieres jugar?
No está prohibido escapar,
está prohibido que te atrapen.

Aula Segura, es parte de una guerra declarada por parte del Estado en contra de una generación de personas y vinculos que se gestan, crecen y se enfrentan a este orden. Una insistencia por cambiar la realidad, por cuestionar su mundo y por un deseo de matar la espera que se fuga desde los espacios diseñados para la domesticación de les niñes y su posterior inserción en el laberinto del trabajo.

La existencia de cuerpos e intenciones. que insisten jugando a burlar y confrontar el Estado de Excepción en el que vivimos, demuestra, una vez más la posibilidad de fuga a los dispositivos de control.

Cada generación que se ha disputado la calle con la yuta y la ciudadania ha tenido que sortear golpes, detenciones, encerronas, llenarse el cuerpo de gas cancerigeno, agua pasada a mierda en el mejor de los casos, cuando no de un liquido que arde y pone la piel de un tono arrebol. El cuerpo como territorio de batalla química. Esas mismas luego lograron sortear el miedo y por unos minutos sentir que pueden tolerar el peso del mundo estoicas, para luego botarlo a la basura, porque el mundo, es su mundo. No es lo que queremos.

Pero tambien ha tenido que aguantar el peso de una serie de legislaciones que desde la clase política han intentado gobierno tras gobierno, acabar con esta subversión adolescente. Sigue leyendo